1. Acogida a los representantes europeos…Buenos días, Boungiorno, Bonjour,  Good Morning, Guten Morgen  Os damos, en esta Jornada de Estudio,  una calurosa y fraterna acogida desde Redes Cristianas y el resto de colectivos españoles integrados en la Red Europea, es decir, desde Cristianos y Cristianas de Base de Madrid, Somos Iglesia, Católicas por el Derecho a Decidir  hasta la Comunidad de Santo Tomás de Aquino y el Movimiento Apostólico Seglar en cuyo local tenemos el gusto de recibiros hoy.

2. Durante esta mañana vamos a tener estos dosactos importantes:

2. La reflexión se va a centrar en Europa bajo el lema: “Razones para la esperanza en una Europa deshumanizada y desencantada”.  Y los dos calificativos están cuidadosamente elegidos:

a) Deshumanizada  porque el proyecto de la UE, basado fundamentalmente en el mercado financiero, está desplazando sine die su  proyecto político y social, está vaciando de contenido la democracia y, como consecuencia, está desmovilizando a la ciudadanía. En este sentido, Europa está siendo nuevamente raptada: Recordáis la leyenda: Zeus, enamorado de Europa, decide seducirla y transformado en toro blanco la llevó sobre su espalda hasta la isla de Creta. Los suyos, presa de dolor, se quedaron llorando amargamente su ausencia… El rapto lo están haciendo en nuestros días los mercados y los mercaderes)… Y con el rapto Europa está perdiendo el  alma, ha renunciada a la utopía: de ser cuna de los derechos Humanos y del Estado social, patria  de libertad y tolerancia, de ser tierra de asilo y acogida, se ha convertido en fortín inexpugnable para los de fuera  y feria de mercaderes para los de dentro. Es triste reconocerlo, pero  Europa se está deshumanizando.

b) Desencantada porque, las religiones, ante el rapto deshumanizador de Europa, oficialmente se están callando, se han refugiado en el silencio. Y esto las convierte en cómplices y culpables de la falta de aliento, de la muerte de la utopía.

Porque, en su mejor versión, las religiones son “tradiciones de sentido” que orientan la vida humana en una relación armoniosa con lo otro, los y las diferentes, y con la Tierra que es la casa de todas y de todos. Pero, además, las religiones disponen de un capital simbólico o núcleo ético  que las convierte en poderosas constructoras de fraternidad: donde el otro/a es un ser extraño o competidor (como en el mercado) las religiones son capaces de ver una persona cercana y fraterna,  cómplice y aliada en el rescate de la dignidad humana desde su lugar más débil, el de las víctimas. Porque las religiones son conscientes de que el rescata de la humanidad desde esos lugares de exclusión es el mejor camino para universalizar y planetarizar su dignidad.

Guardar, pues silencio ante el  rapto que está ocurriendo de Europa, convierte a las religiones en cómplices y comparsas de los nuevos dioses, los mercados. Y así están perdiendo su encanto.   Porque, como cantaba Mercedes de Sosa, “ si se calla el cantor calla la vida; si se calla el cantor muere de espanto la esperanza, la luz y la alegría… el silencio cobarde apaña la maldad que oprime…”  

En estas condiciones,  con una Europa deshumanizada y desencantada, ¿tenemos razones para mantener  la esperanza  en su proyecto humanizador?

Para ayudarnos en esta búsqueda, contamos esta mañana con dos fuertes aportaciones: una conferencia y una mesa redonda. Permitidme unos breves rasgos de nuestro primer participante: Antonio García Santesmases: Es catedrático de Filosofía Política de la UNED Universidad Nacional de Educación a Distancia). Ha sido durante años portavoz de la Corriente Izquierda Socialista y diputado en el Congreso. Entre sus publicaciones destacan: Marxismo y Estado (1986), Repensar la izquierda (1993); Reflexiones sobre el agnosticismo (1994); Ética, Política y Utopía (2001); Laicismo, agnosticismo y fundamentalismo (2007). Ha participado en varios libros colectivos, como Ciudad y Ciudadanía. Senderos de la Filosofía Política. Y ha sido editor de la obra de José L. López Aranguren La izquierda, el poder y otros ensayos, Es un gran conocedor e intérprete de los fenómenos sociopolíticos del momento, hombre dialogante y, sobre todo, un gran amigo. Con todos nosotros y nosotras,  hablando sobre la “La encrucijada europea actual,  Antonio G. Santesmases,